Domba
Regresando al mundo de la mecánica, hoy nos encontramos con Domba, de veintidós (22) años.
Ya habíamos hablado de él en el retrato de Aminou, ya que tienen el proyecto conjunto de abrir un taller. Apasionado desde su adolescencia por los coches que veía debido al trabajo de concesionario de su madre, se fue a Saint-Louis, en Senegal en 2021 para seguir una formación en mecánica antes de regresar a Mauritania, su país de origen, en 2022 por cuestiones de documentación.
Es a través de su tía Aïssata, su acompañante, que descubre y logra integrarse en la formación ofrecida por Caritas. Destaca debido a su experiencia previa con coches y su formación senegalesa, pero asegura que Caritas le ha permitido realizar su trabajo de manera más limpia, detectar mejor las averías, conocer nuevas piezas que hasta entonces le eran desconocidas, al tiempo que le ha permitido realmente situarse en condiciones de trabajo reales.
Sus habilidades también le son útiles en el trabajo, donde a menudo tiene la oportunidad de acompañar a su maestro de prácticas a otras empresas para cambiar bombas hidráulicas, reparar grúas o realizar diagnósticos.
Domba señala, sin embargo, un problema mayor: la falta de material. De hecho, a menudo tiene que trabajar con herramientas obsoletas como la máquina para detectar averías que nos muestra, señalando que no es "del todo moderna, pero nos las arreglamos", o la dificultad que sintió al ver llegar coches eléctricos e híbridos de los cuales no sabía nada, lo que subraya la importancia de las prácticas.
Para terminar, Domba actualmente no recibe salario, y aunque busca oportunidades de trabajo, encuentra dificultades, ya que en Mauritania, los jefes de empresa prefieren reclutar dentro de sus redes de conocimientos cercanos en lugar de basarse en las competencias demostradas.